"Como expresamente lo manifestara la UNASUR el 12 de octubre de 2010, dicha presencia militar es contraria a la política de la región de apego a la búsqueda de una solución pacífica de la controversia de soberanía sobre la Cuestión de las Islas Malvinas, en particular a lo dispuesto por la Resolución 31/49 de la Asamblea General de las Naciones Unidas”, señala la declaración.
En el texto los presidentes del bloque reiteran “su firme respaldo a los legítimos derechos de la República Argentina en la disputa de soberanía con el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes”.
La decisión fue agradecida por el canciller Héctor Timerman, quien participó de la reunión del grupo regional, que sesionó luego de la Cumbre Iberoamericana.