El Proyecto de Ley dispone la inscripción de la condición de detenido-desaparecido en los legajos laborales de los trabajadores víctimas del terrorismo de Estado. Se revisarán así las situaciones de compañeros y compañeras que figuran como “baja”, “cesante”, “suspendido” y otros.
Asimismo, la Comisión de Trabajo por la Reconstrucción de Nuestra Identidad realizará un relevamiento de los compañeros y compañeras desaparecidos del sector privado y encarará varias actividades tendiente a la identificación, preservación y clasificación de informaciones, testimonios y documentos referidos al accionar del terrorismo de Estado.
El proyecto cierra sus fundamentos recordando la importancia de la memoria desde las palabras del compañero Rodolfo Walsh: “Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores: la experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan. La historia parece así como propiedad privada cuyos dueños sol los dueños de todas las cosas”.
En su carta, nuestros compañeros señalaron la cada vez más notoria complicidad empresarial, dado que el “plan económico aplicado por Martinez de Hoz, a nombre de los intereses financieros y terratenientes, necesitaba el correlato de acallar voces del movimiento obrero y sus organizaciones sindicales”.
Desde la CTA no olvidamos a los compañeros y compañeras y los hacemos presentes en cada conquista, en cada derecho que adquirimos, en cada acción hacia la victora de la clase trabajadora.