Recolección de firmas en Congreso contra la Ley Bases y el DNU

"Aguanten los jubilados", gritó alguien desde un auto que se trasladaba por Avenida Entre Ríos hacia Rivadavia. Un muchacho a bordo de un camión de limpieza tocó bocina y agitó un brazo en señal de apoyo. También hicieron lo mismo varias personas en autos particulares y algunas motos.

En cambio, a la hora de firmar contra el DNU y la Ley Bases, si bien hubo varixs adherentes, de distintas edades y géneros, también muchas personas reaccionaban con indiferencia. La campaña nacional promovida por la Multisectorial en Defensa de la Seguridad Social, titulada "Un pueblo firme contra el DNU", busca conseguir un millón de firmas.

"Nos convocamos acá, en el Congreso, para aportar a la Campaña Nacional por 1 millón de firmas para terminar con la vigencia del DNU 70/23. No es un DNU más, como los que han emitido otros gobiernos, pues se trata de un intento de reforma constitucional enmascarado por decreto", expresó la secretaria de Seguridad Social de la CTA-T, Sandra Zapatero.

Y agregó: "Nos hemos reunido para llamar a la comunidad toda a expresarse con su firma respaldando la decisión de terminar con este DNU que nos va a arruinar las condiciones de vida y va a hipotecar el futuro de nuestra Patria. ¡¡¡LA PATRIA NO SE VENDE!!!".

La secretaria de Jubilación y Seguridad Social de UTE-CTERA, Alicia Tantardini, manifestó: "Estamos acá, el sector de jubiladxs en unidad, para plantear este petitorio en contra del DNU, que destruye nuestra Patria, al igual que la Ley Bases".

"Quienes somos adultos mayores estamos dispuestos a dar todo para que finalmente la ley caiga, porque es realmente la disolución de la Patria. Es muy grave. Ojalá todo el pueblo argentino comprenda de qué se trata la Ley Bases. Y necesitamos urgente que el DNU se trate en la Cámara de Diputados para que no siga estando en vigencia, porque, mientras tanto, todo se hace a través del DNU", subrayó Tantardini.

"El sector más afectado con el retiro de la moratoria es justamente el de las mujeres, que son quienes tienen más dificultades para el empleo porque tienen que hacerse cargo de sus hijos y muy pocas mujeres van a poder jubilarse. Y van a tener que esperar a los 65 para tener esa pensión al adulto mayor, que es una pensión que no se hereda y que además significa un haber de hambre que es peor que la jubilación mínima porque es un 80% del haber mínimo", señaló la dirigenta docente.

Por último, se refirió a la necesidad de una recomposición salarial para el sector y al exiguo bono de 70.000 pesos que el gobierno dará en junio para los haberes de la mínima. "Cada día es más inaccesible. El bono que dio el gobierno es muy poco dinero en el marco en el que nos encontramos de alta inflación. Sobre todo, que el compañero jubilado o la compañera jubilada realiza altos gastos en la parte de medicina".