“Como ya nos tiene acostumbrados, el sector minoritario de la CTA que autoproclamó a Pablo Micheli, anunció en forma televisiva y sin consulta con los trabajadores un paro nacional que los cuerpos orgánicos de nuestra A.T.E. debieran acatar. Cada día que transcurre se profundiza la manera antidemocrática en que se conduce ATE. Lamentablemente son moneda corriente, la intervención, la patota, las amenazas, el alejamiento de los trabajadores que ya no deciden en asamblea.
“A contramano además de la mayoría del arco político, decidieron promover y apoyar la extorsión de quienes arma en mano - entregada por el Estado - promovían saqueos, bajo la excusa de que se trataba de un mero reclamo gremial de afiliados de la CTA, para ahora pretender que existe un estallido social que anhelan conducir, soñando con un nuevo 19 y 20 de diciembre.
“Lejos de la aventura proclamada por esta minoría que conduce ATE, la situación requiere una especial atención:
Ante los acuartelamientos con las terribles consecuencias para la población, se requiere una respuesta de los trabajadores defendiendo la Democracia y exigiendo sanciones para los que dispararon contra del pueblo.
Impulsar el reclamo para la democratización de todas las fuerzas de seguridad federales y de cada una de las provincias, en consonancia con el acuerdo para una seguridad democrática, terminando así con su actual organización militarista. La fuerza policial debe regirse por políticas y principios de derechos humanos y no puede nunca convertirse en una fuerza política autónoma financiada por el narcotráfico que persigue y reprime a los trabajadores.
Articular la fuerza federal de ATE para obtener la resolución de los reclamos en el marco de las paritarias estatales, tanto salariales como de otras condiciones de trabajo y que especialmente pongan atención en las brechas y desigualdades que se producen en el seno del empleo público.
“La actual conducción de la ATE se organiza para obtener como objetivo principal el rechazo y la derrota de los puntos que se colocan como peticiones convocantes. Su intención es dejar en evidencia que el Gobierno Nacional no quiere o no puede, para provocar un desgaste del mismo, que sólo pueden capitalizar aquellos sectores que fogonearon y organizaron los trágicos sucesos con las fuerzas policiales; los sectores concentrados y privilegiados que quieren impedir el avance del proceso de transformación abierto en toda América Latina.
“Los trabajadores debemos recuperar nuestra A.T.E. y su profundo sentido democrático, para poder organizar la misma y sus luchas para la obtención de conquistas para los trabajadores estatales y el conjunto de la clase y es una tarea primordial para seguir avanzando en el camino comenzado en el 2003”.
