En el encuentro, que se desarrolló de manera online, González, integrante de esta Secretaría de Relaciones Internacionales enfatizó sobre la necesidad de un diálogo ya no tripartito sino cuatipartito, en el que se incorporen a los movimientos sociales y las comunidades, que puedan dar cuenta el impacto de los modelos de desarrollo y producción, considerando que la pandemia de COVID-19 expuso la injusta distribución de la riqueza y el acceso a los derechos humanos mínimos de la poblacion.
“Entender como derechos humanos el acceso a todos los bienes comunes para toda la comunidad y pensar que las oportunidades de desarrollo no son posibles sin derechos laborales es fundamental para ir hacia la transversalización de la transición justa”, señaló al respecto González.
Cabe consignar que la transición justa es un objetivo planteado a nivel global hacia la implementación de medidas que mitiguen el avance del cambio climático, que sean equitativas para con los países más desarrollados y con los que están en vías de desarrollo y sus recursos naturales. Se basa en un diálogo social del que participen trabajadores, sindicatos, empleadores, gobiernos, y en las consultas con las comunidades y la sociedad civil, que garantice empleos decentes y protección social, para todos los trabajadores afectados por el calentamiento global.