Hugo Yasky, lo saluda Luciana Peker. Tanto este cierre en las paritarias docentes en la provincia de Buenos Aires como el de la Unión Obrera Metalúrgica, entre el 26% y el 29%, ¿marcan el camino a lo que tienen que pedir los otros gremios para generar un equilibrio justo entre la recomposición salarial y que no se acelere la inflación?
H.Y.: Yo creo que es una cifra absolutamente razonable, entre el 28%, el 30%, el 31%, el 32% se van a mover la mayoría de las paritarias. Desde ya que es distinta la situación de los distintos gremios, hay gremios que vienen con más oxígeno en los pulmones porque han cerrado buenas paritarias desde hace muchos años, hay otros que vienen más castigados, como en el caso de los docentes, pero creo que es una cifra razonable.
Yasky, este largo conflicto docente, ¿se podría tomar como señal de que va a ser un año con mucha conflictividad laboral, de que va a haber mucha intransigencia de las partes? ¿Cómo lo visualiza usted?
H.Y.: Yo creo que la intransigencia y la conflictividad no la generamos el sector laboral, me parece que es una mirada por lo menos subjetiva, injusta. Creo que la intransigencia la generan los grandes formadores de precios que no ceden, que tienen altísimas rentabilidades, está demostrado, más altas que las que tienen en sus países de origen, me refiero a las grandes multinacionales del negocio de la venta de alimentos. Y sin embargo, van por más y aprietan, ellos son como los tiburones que la única razón que entienden es morder y tragar. Lo mismo puedo decir de los especuladores en relación con la devaluación monetaria, lo mismo puedo decir de los que especularon con los movimientos que llevaron a que el gobierno tuviera que devaluar. Si cuando se instala un escenario como este, la variable de ajuste terminara siendo el nivel de la demanda salarial -siempre y cuando esta no deje de estar en marcos razonables, como lo está-, si entonces la variable fuera el salario, lamentablemente estaríamos retrocediendo en lo que convirtió a este gobierno, del 2003 a la fecha, en el período más virtuoso para los trabajadores; recomponer el poder adquisitivo del salario. Si perdemos eso, se pierde la razón de ser, el sentido último de este enorme cambio que vivimos en la Argentina a partir de Néstor y con Cristina Kirchner.
Yasky, Santiago Varela le habla. Comparto lo que usted dice con respecto a que no sea la variable de ajuste de esa voracidad empresaria que hay acá. En este panorama donde se vislumbra alguna paritaria con cifras relativamente razonables, como dijimos recién, ¿cómo ve usted el paro de un sector del gremialismo, el de Moyano y Barrionuevo concretamente? ¿Cuál es su opinión al respecto?
H.Y.: Esa es como un arca de Noé, a la que medio de apuro lo subieron a Micheli para darle un tonito un poquito distinto pero el de Micheli es un sector que ya no representa casi nada en el movimiento sindical y la verdad es que cuando uno raspa el barniz, abajo aparecen Barrionuevo y el Momo Venegas, la vieja sagrada familia sindical…
¿Pero la adhesión de los colectivos no va a hacer que el paro tenga impacto en la población?
H.Y.: Pero más allá del impacto que pueda tener, porque la verdad ayer estábamos reunidos con los gremios ferroviarios y la inmensa mayoría no para, pero con que pare uno el problema de los ferrocarriles se complica. La mayoría de los gremios del sector de aeronavegación tampoco va a parar, pero con que pare uno se complica. Pero independientemente de eso, que es una cuestión absolutamente aleatoria porque no se va a demostrar nada, lo que sí está claro es que es un paro de contenido político. Para mí el problema no es que sea un paro político, yo hice muchos paros políticos y los hice a conciencia, con Ubaldini por los 26 Puntos, cuando decíamos recuperar el Estado, terminar con la entrega al Fondo Monetario Internacional, terminar con la entrega a los grupos terratenientes, etc., eran paros políticos y uno los hacía a conciencia y sabía que estaba avanzando en el sentido que corresponde a los trabajadores. El problema de este paro político es el contenido porque si se reunieron con la Sociedad Rural, fueron a Expo Agro, se reunieron con Macri, se reunieron con Magnetto y el resto de los tiburones que quieren seguir comiendo a sus anchas en la Argentina, se reúnen con todos esos y después convocan a un paro nacional contra un gobierno que tiene en la vereda de enfrente a todos esos poderosos grupos que son los que hundieron al país, evidentemente es un paro en contra de los intereses de la clase trabajadora. Sencillamente por eso, no vamos a ser parte de esa convocatoria.
Yasky, lo llevo a otro tema; La Nación subrayó que usted estaba en desacuerdo con las quitas de subsidios al Gas y al Agua, ¿es así?
H.Y.: Señalé un aspecto que no me cerraba, ayer estuve reunido con Carlos Heller y me explicaba que en realidad la letra chica de lo que se resolvió, lo contempla. Yo dije, una persona que tiene una cocinita y una estufa en una vivienda modesta, tiene mucho menos margen de reducir el 20% de consumo que alguien que tiene una pileta con aire climatizado que solamente apagando el aire climatizado de la pileta ya va a reducir más del 20% y está en un country. Eso es lo que señalaba, que tiene más margen de reducir el que gasta más y el que tiene más dinero y por eso despilfarra, que el pobre tipo que vive con lo justo y que es muy poco lo que puede reducir porque es muy poco lo que gasta. Pero ayer que estuve hablando con Heller me decía que -entre paréntesis, sería el gobierno el que tendía que llamar a las centrales para explicar esto- se va a tener en cuenta el nivel de ingresos del grupo familiar, el lugar donde vive e incluso hay una cláusula que si definitivamente no se puede pagar el aumento, el aumento queda sin efecto. Así que creo que, de alguna manera, queda contemplado ese aspecto que a mí me hacía ruido.
¿Pero usted no está en desacuerdo en general con la quita de subsidios?
H.Y.: No, en absoluto y además lo dije ni bien salió la medida. Es más, creo que se tendría que haber hecho antes porque no se puede subsidiar indiscriminadamente, el Estado nacional tiene que subsidiar a los que necesitan, no a los que no necesitan.
Le reitero una pregunta para cerrar el diálogo: ¿usted imagina un año con mucha conflictividad laboral o imagina que se van a ir encausando los temas salariales?
H.Y.: Yo creo que se van a ir encausando porque con todo lo que se pueda decir… fíjese el paro, Barrionuevo reclama paritarias libres, nosotros en la época del menemismo, que fue la época de gloria de Barrionuevo, la CTERA jamás tuvo paritarias, no tuvimos un sola paritaria y el día que hicimos un paro porque estaban destruyendo la escuela pública, provincializándola, cosa que todavía estamos pagando esa hipoteca, salió Barrionuevo con un afiche que decía “Mary Sánchez largá el bombo y agarrá la tiza”. Respecto a la pregunta que usted plantea, creo que se va a encausar por eso, porque tenemos paritarias libres y en un país donde las paritarias son libres podrá haber discusiones, podrá haber conflictos pero eso es parte de la democracia, eso hay que defenderlo a muerte. El conflicto cuando se da en el marco de la democracia fortalece a la sociedad, le crea anticuerpos.
Yasky, muchas gracias.
H.Y.: Hasta luego.
Hasta cualquier momento.
