Desde la CTA rechazamos las pretensiones de este proyecto impulsado por el legislador tucumano Walter Berarducci, por entender que se trata de una nueva maniobra y actitud anti-sindical favoreciendo a las empresas y perjudicando a los trabajadores organizados.
Con esta actitud queda demostrado que se pretende irrumpir el normal funcionamiento y representatividad de las organizaciones sindicales perjudicando directamente a los trabajadores que en su mayoría son asistidos desde lo gremial, legal, social y económico por sus sindicatos. El parlamentario tucumano argumenta que este pedido obedece a la situación que vive el país y el mundo tras declararse la pandemia del virus COVID-19. Sin embargo, el también abogado ex secretario de gobierno municipal impulsa este proyecto sin brindar alternativas para la continuidad de las obligaciones y responsabilidades que mantienen los sindicatos de la Argentina.
“La Legislatura tucumana resolvió a través de este proyecto, solicitar al Poder Ejecutivo Nacional, que contemple la posibilidad de suspender el pago por 180 días, el aporte sindical y la cuota solidaria realizada por los trabajadores en relación de dependencia, debiendo en consecuencia ser percibida en su totalidad por los mismos y las contribuciones patronales realizadas a las asociaciones sindicales como consecuencia de los convenios colectivos de trabajo. Dicha medida no podrá conculcar los derechos adquiridos ni la defensa gremial en pos de los intereses del trabajador”.