Por la CTA, estuvo Yasky, su secretario Adjunto y titular de la Federación de Trabajadores de la Industria y Afines (FeTIA-CTA), Pedro Wasiejko; la secretaria general de la Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA), Stella Maldonado; y el secretario de Relaciones Internacionales de la Central, Victorio Paulón.
Después del encuentro con Ryder, que duró unos 45 minutos, el secretario general de la CTA explicó que “le comunicamos que hay un compromiso del ministro de Trabajo de empezar a discutir sobre las tercerizaciones fraudulentas, y además le contamos sobre otro compromiso del gobierno, que es convertir en delito penal el trabajo infantil en la Argentina, y el de sancionar la ley de trabajadoras de casas particulares”.
Sobre el histórico reclamo de personería gremial por parte de la Central de Trabajadores de la Argentina también se habló en la reunión Ryder. “Le planteamos que un decreto que igualara derechos entre las organizaciones con personaría y las de simplemente inscriptas generaría igualdad de derechos en la practica y dejaría en abstracto lo de tener o no personería”, aseguró Yasky. Los dirigentes de la Central esperan llegar a la reunión anual de la OIT, que se concretará en junio próximo, con “avances concretos en el tema de la libertad sindical”.
Respecto a las negociaciones paritarias, los dirigentes plantearon que la línea de referencia de la CTA es el 25%. “Declaramos imprescindible cuidar los puestos de trabajo, porque hay una tensión concreta entre el aumento de precios y la necesidad de seguir sosteniendo el empleo. Sería fácil bajar los precios haciendo entrar productos de afuera, pero terminaríamos destruyendo lo que se avanzó en términos de empleo. Entonces, ese delicado equilibrio nos preocupa porque no queremos que bajen precios a costa del empleo”, expuso Yasky.
Pedro Wasiejko, a su vez, rechazó la hipótesis de implementar negociaciones semestrales: “Hay que buscar discusiones salariales que garanticen el poder adquisitivo de los trabajadores y el crecimiento real del salario. Y obviamente pretender negociar cada 3 meses es tirar una bomba molotov en el asado”.
Sobre el anuncio presidencial de subir un 20% del piso del pago del impuesto a las ganancias, Yasky opinó: “Es un avance, un dato positivo. Sabemos que no es la solución de fondo, que sería cambiar la ley, porque debería ser un impuesto mucho más progresivo, ampliándolo a los jueces y a las transacciones financieras, lo que permitiría hacer imperceptible la presión sobre los asalariados de las franjas más bajas. Esa discusión requiere un cambio de la ley, pero sabemos que en un año electoral es muy difícil”. En conclusión, la decisión del gobierno sobre el impuesto a las ganancias, comunicada anoche en un acto en el que estuvo tanto Guy Ryder como Yasky presentes, “afloja el lazo y nos da una perspectiva clara de cara a las paritarias, aunque hubiese sido mejor una solución de fondo, que seguramente vamos a poder discutir en el corto plazo”.
Por último, Yasky se refirió al pedido de racionalidad en las negociaciones paritarias por parte de Cristina Kirchner. “Nosotros sostenemos una recuperación del salario porque queremos apuntalar este modelo, y este modelo necesita que los trabajadores sigan teniendo capacidad de consumo, de otra forma la rueda de la economía no se mueve y eso es lo que peor que nos podría pasar”.
