La pandemia se llevó a un gran compañero de lucha, con quien hemos compartido momentos de lucha y de construcción en unidad. El dolor nos quita las palabras, pero podemos sintetizar al Puma como un verdadero compañero, humilde y firme, respetuoso de todas las posturas, y de gran corazón.

Cada hermano laburante, cada organización del pueblo de Salta, encontró siempre un hermano en Juan. Más allá de toda diferencia, un constructor de unidad. Abrazo Puma querido, a donde sea que estés.

Los y las estatales de Salta y de la Verde y Blanca de todo el país te guardaremos siempre en nuestro corazón, y estarás siempre presente.

Hasta siempre, compañero.

Agrupación Verde y Blanca Nacional