, por Página/12

Fuente: Página/12

“Es una verdadera inmoralidad”

El diputado del Frente para la Victoria Edgardo Depetri reclamó en el recinto el cumplimiento de la resolución de la ONU y la liberación de la dirigente social. La diputada radical jujeña Alejandra Martínez salió en defensa del gobernador Gerardo Morales.

La resolución de un organismo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que reclamó al gobierno argentino la libertad de la dirigente social y parlamentaria del Mercosur Milagro Sala detenida desde enero en la provincia de Jujuy también se hizo sentir en el recinto de la Cámara de Diputados. “Pido, exijo, solicito, planteo, quiero que el gobierno de la Nación, que el presidente (Mauricio) Macri interceda y aproveche esta resolución de la ONU para resolver esta verdadera inmoralidad”, sostuvo el diputado kirchnerista Edgardo Depetri. Araceli Ferreyra, del Movimiento Evita, calificó al gobernador jujeño Gerardo Morales como “misógino y machista” y denunció que las diputadas de distintos bloques que fueron a la provincia para reclamar la liberación de Sala y otras siete mujeres de la organización Tupac Amaru fueron espiadas por orden del gobernador. Reclamó que la comisión de Derechos Humanos se constituya en Jujuy “contra este tirano que está arrasando contra el Estado de derecho”. La radical jujeña Alejandra Martínez salió en defensa de su gobernador: “Morales es el político más democráticos, o uno de los más democráticos del país”, afirmó sin sonrojarse.

“Hay una detención arbitraria, arbitraria e ilegal. Hay una detención que se realizó por una revancha política o tal vez por un intento de control social, del conflicto de la calle, de mirada diferente, de construcciones populares que tienen miradas distintas sobre la construcción y la organización popular de la política y sobre todo los derechos del pueblo jujeño”, arrancó Depetri para reclamar la liberación de la dirigente de la Tupac. “Hay un trabajo enorme de abogados prestigiosos de organizaciones como el CELS y otras que impulsaron este reclamo entre la ONU y la ONU fue clara: exige la libertad inmediata de la dirigente social y diputada latinoamericana del Mercosur, la compañera Milagro Sala”, señaló.

“Es el mismo grupo de trabajo que planteó que en Venezuela había que liberar a Leopoldo López, dirigente opositor al chavismo y hemos visto al presidente Macri exigir en los organismos internacionales la inmediata liberación de Leopoldo López, porque la ONU lo plantea, bueno, ahora, la ONU plantea la libertad de Milagro Sala. Sería importante que interceda ante el gobernador Gerardo Morales y una justicia armada a su antojo, a los defensores de la república y de la democracia”, continuó Depetri, quien detalló como Morales aumentó de cinco a nueve los miembros del Superior Tribunal de Justicia de la provincia para tener una justicia adicta a sus propósitos represivos.

Depetri se dirigió a los diputados del oficialismo que reprobaban su planteo: “Lo que ustedes han hecho con Milagro Sala no se puede sostener. El frente de Milagro Sala organizó a los pobre y los reivindicó, y les creó empleo, mientras ustedes votaban las leyes acá, que llevaban a la pobreza y a la desocupación a millones de compatriotas”.

La diputada correntina Araceli Ferreyra (Peronismo para la Victoria-Movimiento Evita) denunció que el gobierno de Morales detuvo a mujeres de las organizaciones de la economía popular por intentar vender sus productos en las calles jujeñas y advirtió que “si Milagro Sala sigue en la ilegalidad” con su detención pedirá “el juicio político” contra los responsables de mantenerla presa y la intervención de la justicia de Jujuy.

Desde el oficialismo, la única que salió en defensa del gobernador fue la diputada moralista Alejandra Martínez. “Quiero decir que defender los derechos de las mujeres no tiene nada que ver con defender a los que cometen delitos”, sostuvo la radical jujeña y acusó a Sala de “robarles a los jujeños”. Luego quiso dar cuenta de su conocimiento de la causa: “Milagro Sala es la que tiene una mansión muy cerca de la mía” y, ante las sonrisas e ironías de propios y ajenos, corrigió: “de mi casa”.

Martínez buscó salir de su furcio con un discurso que concitara la adhesión y no la burla de sus propios correligionarios y oficialistas: “Que Sala les robara a los jujeños no hubiera sido posible si no hubiera tenido la anuencia y una matriz de corrupción permitida por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner”, declamó, consiguió su objetivo y se entusiasmó: “Morales es el político más democráticos, o uno de los más democráticos del país”, concluyó la diputada radical.