Por eso tiene tanta trascendencia. Hace 9 años en el medio de las tensiones que vivíamos ese día, discusiones que siempre se dan antes de un hecho como ése, con la incertidumbre de no saber a ciencia cierta cómo terminaba esa jugada, en ese momento no teníamos dimensión de la verdadera trascendencia histórica de lo que se vivió ese 5 de noviembre de 2005. Hoy podemos decir que fue un punto de inflexión. Creo que hay un antes y un después, así lo va a rescatar la historia, y tanto Kirchner como Chávez, van a formar parte de las páginas más gloriosas de la lucha de los pueblos de América Latina. Seguimos teniendo pendiente como una tarea a realizar, como un imperativo histórico, la construcción de la Patria Grande. Porque ese No al Alca, para que tenga trascendencia en el tiempo necesita de la construcción de la unidad de los latinoamericanos.
Hoy esta rememoración no es una mirada por el retrovisor hacia lo que pasó. Ante el asedio de los fondos buitres, ratificar la lucha por la soberanía, nuestra posición antiimperialista como trabajadores es clave. Porque estamos defendiendo el presente y el futuro de la Argentina. Porque tenemos candidatos a presidentes que están esperando para ir a arreglar con los fondos buitres a Estados Unidos. Un país que tiene representantes de los fondos buitres mezclados entre los grupos empresarios de la clase dominante.
Particularmente en esta rememoración le decimos no al Alca, pero también le decimos no a los fondos buitres.